El sábado 8 de junio, vivimos un taller con dos temas «La espiritualidad en el Matrimonio» y «Los cinco lenguajes del amor»
Participaron con gran entusiasmo matrimonios del Decanato de Calera.
Reflexionamos sobre la naturaleza de las personas, que además de cuerpo somos alma y espíritu y que la espiritualidad es un camino para acercarnos a Dios y a la Salvación; para ser reflejo del amor de Dios.
No hace falta buscar la espiritualidad en un lugar especial, pues la encontramos en nuestra propia familia; las ocupaciones y preocupaciones del día a día son parte también de nuestra vida espiritual.
Identificamos 4 formas en las que la familia puede desarrollar su vida espiritual:
1. Vivimos en comunidad. En armonía con nuestro cónyuge, hijos, padres y hermanos. Nos ayuda a no ser egoístas, a pensar en los demás y a acercarnos más a Dios.
2. Oración. En momentos difíciles de dolor y angustia, pero también en los momentos de alegría. La Eucaristía en familia es de gran importancia pues nos brinda una mayor unidad.
3. El ejercicio de nuestra voluntad (Espiritualidad del amor exclusivo y libre). El compromiso que expresamos día con día de ser fieles, pase lo que pase, en los momentos buenos, pero también en los difíciles.
4. Cuidado de las personas que nos rodean. Servir desde nuestra actividad ordinaria a la familia, en el trabajo, en las labores domésticas y ene l cuidado de los demás. Hasta el acto más pequeño pero hecho con amor por los demás, implica vivir la Espiritualidad en familia.
Al concluir este primer tema se realizó una dinámica para aprender a hacer oración en pareja.
En un segundo momento, aprendimos sobre los cinco lenguajes del amor.
Cada persona tiene un lenguaje diferente para expresar y recibir el amor y se pueden identificar 5.
1. Palabras de afirmación. El recibir palabras de reconocimiento a nuestra persona o nuestras acciones.
2. Regalos. Desde un pequeño detalle material, hasta tiempo de diálogo.
3. Tiempo de calidad. Estar cada minuto atento con amor a la otra persona, a sus sentimientos y pensamientos, evitando que algo externo nos distriaga.
4. Acto de servicio. Ayudando a los demás, a imagen de Cristo quien vino a servir
5. Contacto Físico. Desde tomarse de la mano, hasta un fuerte abrazo con cariño.
Tuvimos un momento muy emotivo en el cual los matrimonios pudieron dialogar y agradecerse mutuamente por su servicio y concluyeron con muestras de afecto físico a través de un abrazo.
Todo esto pudimos reflexionarlo a la luz de la Palabra de Dios donde nos damos cuenta de que Él es amor y nos llama a vivir como familia cerca de él.